Yo voy a facilitar a tope la incorporación del nuevo gerente de la cuenta, lo que me llama la atención es que su forma de reestructurar las relaciones con el cliente se base en su enemistad hacia el cordinador de servicios de la empresa.
Si normalmente es la figura del cordindador quien atiende las pequeñas tareas y mantenimientos que quedan fuera de los proyectos ¿puede un gerente de cuenta forzar la estructura de la empresa y hacer que en determinados clientes esto no sea así?
Está ocurriendo, las claves están en tener a alguien que quiera hacer el "trabajo sucio", después que la empresa pueda tener a ese perfil que no factura contra proyectos, ni tampoco es comercial... un poco en tierra de nadie.
Lo cierto es que aquí huele bastante mal, nos huele a todos, intentar suplantar un perfil concreto de la empresa con otra persona, en un cliente importante, por una enemistad es muy feo, y todos lo sabemos, responsables de línea, en adminsitración... incluso esta persona que será quien le sustituya.
Y es tan feo, que prefiere hacerse el loco en una reunión, hasta que el comercial se cansa y grita "¡coño, ¿quieres hacerme caso de una puta vez?!" y el otro contesta "¡déja de tocarme los cojones! ¡estoy hasta los cojones!"
Una reunión de traspaso que fue pura poesía.
jueves, 28 de septiembre de 2006
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