Estoy de nuevo en mi cliente estrella "M", con una pasada de retraso en los aviones (demasiado viento) salgo a las 5:30 de casa y llego al cliente a las 13:00...
Dos días para arreglar un problema del software que subcontratamos en la primera fase del proyecto. Quedo con los proveedores de esa primera fase, a los cuales ya les hemos comunicado que no vamos a continuar con ellos en la segunda y les tenemos retenido el pago restante...
Quedamos con el responsable técnico del cliente (mi cliente, ellos son una subcontratación) porque no acaban de fiarse de la mala impresión que yo les trasmito (esa no es la razón de la reunión, al menos la declarada).
Pueden verificar esa mala imagen que se tiene de nuestro producto de primera mano, además con enfado por tener que contar otra vez lo mismo.
Pero bueno, vienen para arreglarlo, parece ser que ya está detectado el problema, a ver si se soluciona y vamos avanzando. Es una pena que deba ser con otra empresa... Bueno no es una pena, me alegro, no he visto en mi vida un comercial más manipulador con el que me haya tocado tratar como con el de este proveedor. Solo me sabe mal que al final las culpas se las echarán a sus técnicos, estoy por enviarle un mail a la directora comercial para decirle: "el que la ha cagado es este tío, no culpes a los demás"
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