jueves, 31 de agosto de 2006

Un cliente nada precavido

Uno de los puntos que me llamó la atención al volver del verano fue que mi jefe (ya he nombrado en alguna ocasión a una jefa, pero es que tengo dos al mismo nivel) hubiera enviado un fichero con una presentación al cliente, o que el comercial se la hubiera pedido a él... pero como yo estaba de vacaciones, con el comercial no estoy en mi mejor momento... pues, en fin, no le di más vueltas.

Hoy me entero, ahora que mi jefe está de vuelta y me llama para contarmelo, que envió el fichero al concejal a petición del comercial para hacer una presentación a la prensa, y que el interlocutor que tenemos habitualmente en el proyecto, cuando se enteró (porque le reenviarían el correo) llamó al móvil de mi jefe a gritarle indignado...

Alucino, la explicación es que tenemos un interlocutor, contratado para ayudar en las tareas del proyecto que ha abado adueñándose del mismo en el cliente (¡total si nadie quiere hacer nada allí!) y ahora es quien "manipula" dando la información que quiere a quien quiere y en las dosis que considera oportunas... eso sí, ¡parece que se le suben los humos a la cabeza!

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