Hay una realidad de casi todos los proyectos que desarrollaba mi área: cuesta muchísimo cerrarlos.
El grueso del proyecto sí se desarrolla más o menos en los plazos indicados: ese "más o menos" está casi directamente ligado al grado de implicación del cliente (aunque resulta raro a veces trabajamos con clientes que casi no participa por desinterés en el proyecto con lo cual algunos plazos se estiiiiiran)
Una vez acabada la parte principal se nos atasca el proyecto, y es que siempre hay detalles que al comienzo del proyecto aún no tenemos (funcionalidades en nuestros productos, generalmente) y que cuando llega la hora de ponerlo en marcha para cerrar el proyecto... seguimos sin tener... ya nadie trabaja en él, simplemente estamos esperando ¡cómo nos cuesta innovar en mi empresa!
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